miércoles, 30 de octubre de 2013

Tarjeta de visita


La tarjeta de visita del olvido,
amarga como siempre,
presenta sus respetos a mi piel atormentada. 
Con sonrisa de anuncio de dentífrico
le hago los honores
y ensayo nuevas formas de dolor
y de grito y de ausencia.

11 comentarios:

  1. Amarga tarjeta, en verdad... Espero que pronto se restañen las lágrimas de tu protagonista.
    Un abrazo.

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    1. Son sólo heridas que van y vienen, ella las conjura así.
      Un fuerte abrazo, amigo.

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  2. Nada es eterno.
    Cálzate las botas y camina, embriágate de luz y aire.
    ...y cuídate.

    Salud!

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    1. No sólo las botas, hasta he nadado estos días de mar de otoño en calma absoluta... Un privilegio impensable!

      Salud, Loam!!

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  3. Yo, que soy hijo único, te diré que, a veces, me alegro de que se olviden un rato de mí. Me agobia la gente tanto como la soledad absoluta. Y escribo para olvidar el olvido.

    Un abrazo.

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    1. Comprendo bien. No, a mí no me agobia la soledad, vivo con ella, pero hay olvidos a los que les cuesta cicatrizar. Y, como tú, escribo a veces para olvidar ese olvido, a veces para consolarme y la mayoría de las veces para divertirme sin más (y sin menos)
      Un abrazo enorme.

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  4. :-( pero al final se largará cargándose de recuerdos.

    Siempre aparecen nuevas experiencias que nos cambiarán.

    Ánimo

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    1. Siempre se largan, hasta los olvidos :)
      Muchas gracias, Oski!

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  5. Para muestra un botón.
    Da gusto leerte.

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