viernes, 13 de julio de 2012

La palabra precisa

La encontré en el suelo, junto a la puerta.

En el sobre venía escrito mi nombre. La carta contenía una palabra sola: "Mañana". Nada más. El olor del papel me trajo difusamente el recuerdo de un ayer lejano.

Mañana.

Guardé en sus botes todos los comprimidos dispuestos como un ejército alrededor de la taza de café...

Mañana...

2 comentarios:

  1. Sí, María, creo que es la palabra precisa y no hace falta ninguna otra. Quizás todos esperamos esa carta con esa palabra que nunca llega.
    Un abrazo en la noche.

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  2. A veces una palabra puede condensar la dosis necesaria de esperanza, como una píldora milogrosa.
    Un abrazo, Rafael, feliz día.

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